El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, advirtió hoy que cualquier intervención militar podría dificultar la posibilidad de calmar las tensiones en la península coreana, por lo que hizo un llamado a las partes involucradas a solucionar la crisis mediante métodos diplomáticos, según la agencia Interfax.
Durante una reunión con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en Londres, donde están reunidos los ministros de Exteriores del G8, Lavrov insistió en que "no debería haber provocaciones militares", en referencia a las maniobras que desde inicios de marzo realizan de manera conjunta Estados Unidos y Sudcorea.
Mientras, el comando integrado de las fuerzas estadounidenses y sudcoreanas elevó de tres a dos el nivel de alerta —el nivel uno es sinónimo de guerra— alegando la "amenaza vital" que representa la República Popular Democrática de Corea (RPDC), añade EFE.
Japón también se declaró el miércoles en "estado de alerta" para interceptar "cualquier misil que amenace su archipiélago". La víspera, misiles Patriot habían sido desplegados en el centro de Tokio y en torno a la capital.
Estados Unidos y la inteligencia sudcoreana afirman que la RPDC podría efectuar un lanzamiento de misil entre el 15 y el 25 de abril. La presunta prueba coincidiría con la visita a Seúl de Kerry y del secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, que llegarán a la capital sudcoreana el viernes.
Tomado: Granma