En la madrugada del 27 de agosto de 2016, en una finca del sector La Corona del corregimiento Puerto Claver, municipio de El Bagre (Antioquia), tropas del Ejército pertenecientes a la Brigada XI capturaron a cinco personas, entre ellas tres campesinos y dos integrantes de las Farc que se desplazaban hacia la zona de ubicación, transición y normalización establecida en la vereda Carrizal.
Los guerrilleros capturados son Víctor Manuel Gutiérrez y Uberley Madrid, miembros del Frente 36 de las Farc, a los cuales también se les incautó dos pistolas durante la captura. Las cinco personas aprehendidas se encuentran en este momento en la Estación de policía del municipio del Bagre y, al parecer, la fuerza pública intenta hacerlos pasar como integrantes del ELN, pese a que tres de ellas son personas de oficio campesino que no tienen relación con la insurgencia, lo cual daría lugar a lo que se conoce como un falso positivo judicial. Así mismo, debe anotarse que el guerrillero Uberley Madrid fue golpeado por soldados del Ejército durante la captura.
Lo delicado de esta situación es que se presenta a pocas horas de que Timoleón Jiménez, máximo comandante de las Farc, ordenara el cese al fuego definitivo a la insurgencia; y dos días antes de que Juan Manuel Santos, presidente de la República, se disponga a ordenar el mismo cese al fuego al Ejército Nacional.
Este episodio perturba el clima positivo que se venía generando en la negociación entre el gobierno nacional y la insurgencia. Además, pone en situación de alerta ante una posible violación del acuerdo por parte del Ejército, ya que existen protocolos para el traslado de los guerrilleros a los sitios acordados y en este caso se incumplieron y violentaron.
Estos hechos ocurridos en El Bagre parecen de actuar deliberado, generan desconfianza, y sólo entorpecen el desarrollo de lo acordado entre el gobierno y las Farc. Por tal razón, el gobierno debería hacer un llamado de atención al Ejército y generar una respuesta inmediata para este incidente, porque este es un precedente que podría repetirse en cualquier región del país. El traslado de los guerrilleros de las Farc a las zonas de ubicación, transición y normalización debe ser un tema tratado con cautela porque este tipo de hostilidades podrían causar un retroceso en el acuerdo de paz definitivamente firmado.
Análisis Urbano hace un llamado urgente al presidente Juan Manuel Santos y al ministro de la Defensa, Luis Carlos Villegas, para que revisen y ordenen el cumplimiento de los protocolos establecidos para este traslado; igualmente, para que ordenen la libertad inmediata de las cinco personas detenidas.
Colombia pasa por un momento histórico sin precedentes y el conflicto armado con las Farc llega a su fin. El país necesita hechos de paz reales y no acciones negativas que sólo entorpecen el proceso, obedeciendo, tal vez, a intereses de quienes sólo pierden cuando el negocio de la guerra se acaba.
Tomado: Agencia Prensa Rural