Al vencerse el tiempo para su detención la condena de 18 meses contra Klein prescribió, sostuvo el abogado Flavio Amador, quien defiende aquí de oficio al señalado como criminal de guerra, citado por una radioemisora local.
Esa pena le fue impuesta en Colombia en ausencia por ser responsable de los delitos de instrucción y entrenamiento en tácticas, técnicas o procedimientos militares o terroristas, agravado por haberse cometido con mercenarios, y concierto para delinquir.
Klein, nacido en 1942, estableció una empresa privada de mercenarios llamada Spearhead Ltd. con la que proveyó armas y entrenamiento a fuerzas armadas y grupos irregulares de varios países en especial Sierra Leona y Colombia, donde entrenó a paramilitares en la década de 1980.
En una entrevista concedida a un medio de prensa local hace algún tiempo, Klein afirmó que visitó este país por solicitud de la policía para entrenar a sus miembros.
Tomado: Prensa Latina