Los estudiantes de manera creativa, reunidos en la Mesa Amplia Nacional Estudiantil, convocaron a un pupitrazo bailable, como parte de la programa que se han propuesto llevar a cabo durante el año, con el ánimo de seguir armando la propuesta educativa alternativa, como respuesta a la privatización que el gobierno pretende hacer a la educación pública.
Los estudiantes de las universidades públicas han demostrado su gran capacidad para planear la educación de todos en igualdad de condiciones, acorde con las necesidades que el país requiere, y dispuesta a transformar a través de la academia las profundas diferencias sociales, impuestas por unas élites que no representan los intereses de las mayorías; sino que por el contrario sus políticas limitan el acceso a la educación, para así seguir sosteniéndose en el poder. Necesitan un pueblo sumiso y carente de crítica, y la educación se convierte en obstáculo, que hay que limitar.
Los estudiantes en este momento tiene el gran reto de transformar la educación, no solo para ellos sino para las generaciones futuras, de lo que se construya aquí definirá en buena parte el país queremos y soñamos.