Karl Marx y Friedrich Engels publicaron el manifiesto en 1848, a pedido de la Liga de los Comunistas, de la cual formaban parte.
Hace 169 años, un 21 de febrero de 1848, Karl Marx y Friedrich Engels publicaban por primera vez el Manifiesto del Partido Comunista (Manifest der Kommunistischen Partei, por su título en alemán), uno de los tratados políticos más influyentes de la historia.
Siendo una petición de la Liga de los Comunistas para Marx y Engels en 1847, el documento tardaría casi un año en ser publicado, en la ciudad de Londres.
Reconocido mundialmente como el Manifiesto Comunista, entre los aspectos más importantes de este tratado, Marx abarca la existencia de dos clases sociales: la burguesía, quienes son los capitalistas modernos, dueños de los medios de producción social, los cuales emplean trabajo asalariado, y el proletariado, es decir, aquellos trabajadores asalariados, quienes son obligados a vender su fuerza de trabajo, al no disponer de medios de producción propios.
Por otra parte, esta proclama asegura que la historia política e intelectual de una sociedad está determinada por el modo de producción y la formación socioeconómica que deriva de él.
Asimismo, afirma que el proletariado es la única clase social, en la actual sociedad moderna, cuya emancipación significará la liberación de toda la humanidad mediante la revolución comunista: la abolición de la propiedad burguesa, las clases sociales y el Estado.
Igualmente, determina que, una vez aparecidas las clases sociales sobre la base de la propiedad privada y la explotación, la historia de las sociedades pasó a ser, simplemente, la historia de la lucha de las clases entre explotadores y explotados.
Estos preceptos no sólo fueron revolucionarios para su época, sino que sus ideas han tenido un fuerte impacto en el desarrollo de la historia mundial.
Numerosos conflictos, guerras e intentos revolucionarios fueron realizados tomando como base las ideas declaradas en el Manifiesto, siendo uno de los más destacados la Revolución Rusa, la cual llevó al poder a los bolcheviques en 1917 y demostró a los revolucionarios del mundo que existe una alternativa válida a la vía capitalista.
Tomado: Telesur