El excanciller Patiño (2010-2016) indicó el lunes que Moreno comenzó a colaborar con la Agencia de Inteligencia Central (CIA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos en diciembre de 2013, cuando fue nombrado enviado especial de Ecuador en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para temas de discapacidad y accesibilidad.
“Moreno se convirtió en un infiltrado de la CIA por chantaje (...) estamos completamente seguros de que mientras Moreno estaba en Ginebra estableció una relación muy cercana con la CIA y con el Gobierno de EE.UU. porque seguramente le descubrieron unas cuentas secretas que él había abierto en Panamá, a través de su hermano, para guardar dinero de la corrupción”, precisó en una entrevista con la agencia rusa de noticias Sputnik.
De hecho, Ronny Aleaga, diputado opositor del partido Revolución Ciudadana (RC) del expresidente Rafael Correa (2007-2017), presentó el 24 de febrero documentos ante la Fiscalía Anticorrupción, y acusó al actual mandatario de adquirir un apartamento gracias a sobornos que supuestamente había recibido cuando fue vicepresidente de Correa.
“La CIA y EE.UU. deben haber encontrado esa cuenta secreta, que nosotros no la conocimos nunca; recién nos enteramos cuando ya estaba como presidente (...) hemos pedido desde hace más de un año que la abran y, como siempre, como Moreno es un farsante de primera especie, salió públicamente cuando ya no le quedó opción a decir que abran la cuenta, pero siguen sin abrirla”, avanzó el excanciller.
Cables del país norteamericano filtrados por el portal de filtraciones WikiLeaks detallaron que el ministro de Telecomunicaciones de Moreno, Andrés Michelena, que supone “una de las personas más cercanas” a Moreno, era informante de la CIA, sostuvo Patiño.
Moreno ganó las elecciones presidenciales de 2017 como candidato del partido de izquierda “Alianza País”. Su mandato ha sido afectado por varios factores, entre ellos sus promesas no cumplidas y posibles casos de corrupción.
Su posible implicación en un escándalo de corrupción de gran envergadura ha provocado mucha indignación en el país sudamericano. No obstante, el actual jefe de Estado rechaza, a su vez, todas las acusaciones en su contra y culpa a aliados de Correa de impulsar una campaña para desprestigiarlo.
Tomado: Tercerainformacion