La Asamblea General de la ONU inició este martes su 71 periodo anual de sesiones en Nueva York con enérgicos llamados a la paz en Siria, felicitaciones a Colombia por poner fin a la guerra más larga del continente americano y reclamos para respetar el acuerdo del clima de París.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, propuso explorar el establecimiento de un grupo de alto nivel para mejorar el proceso de toma de decisiones en el seno de la organización.
Durante la primera jornada del debate anual de la Asamblea General, lamentó ver que acciones esenciales y buenas ideas son bloqueadas en el Consejo de Seguridad, la Asamblea General, la Conferencia de Desarme y otros órganos, detalló PL.
En su último discurso al frente de la ONU, el diplomático sudcoreano también se refirió a la inestabilidad y conflictos que se viven en lugares como Siria y Sudán del Sur.
Sobre la cuestión palestina, manifestó que la perspectiva de una solución de dos estados parece disminuir cada vez más, mientras la ocupación israelí se acerca al medio siglo y priva a los palestinos de su libertad y del futuro que les corresponde.
Respecto a Siria, deploró el ataque a una caravana humanitaria de la ONU y la Media Luna Roja Árabe en esa nación, al tiempo que lo calificó de repugnante, salvaje y aparentemente deliberado.
En tanto, reiteró que el próximo lunes viajará a Colombia para la firma del acuerdo de paz y aseguró que la ONU apoyará a ese país en cada paso del camino.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien también ofreció su último discurso en ese plenario, reconoció el abismo existente entre países ricos y pobres; y llamó a reducir las diferencias raciales y étnicas.
PL precisa que en su intervención reiteró las tradicionales posiciones que Washington intenta imponer al resto del mundo sobre democracia y derechos humanos, aunque admitió que la sociedad norteamericana tiene serios problemas en esos aspectos.
Aseguró además que «una nación rodeada de muros solo conseguiría encarcelarse a sí misma», en una crítica velada al candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, y sus posiciones xenófobas.
A pesar del reconocido papel de Estados Unidos en la guerra de agresión contra Siria, Obama abogó por una solución pacífica al conflicto en esa nación árabe, «donde la diplomacia debe ser un factor clave» para frenar la violencia, pues ninguna de las partes involucradas vencerá a través del uso de la fuerza.
Los mandatarios que intervinieron este martes también abordaron asuntos como el combate y la mitigación del cambio climático y la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030, que cumple un año de haberse adoptado.
El calentamiento global fue otro tema citado con frecuencia en la sala de sesiones, donde los mandatarios pidieron cumplir con los compromisos alcanzados en diciembre en París por 195 países.
Para que entre en vigor el acuerdo, que pretende limitar el aumento de la temperatura global por debajo de 2º C con respecto al nivel preindustrial, este debe ser ratificado por 55 países que sumen el 55 % de las emisiones.
TEMER AISLADO
El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, e integrantes de otras delegaciones de países latinoamericanos abandonaron este martes la sala donde se realizaba la Asamblea General de la ONU, negándose a escuchar el discurso del nuevo mandatario de Brasil, Michel Temer.
El gesto de Solís quedó registrado en una imagen de video, en que se puede ver al mandatario retirándose de la sala acompañado de su ministro de Relaciones Exteriores, Manuel González.
Por su parte, el canciller de Ecuador, Guillaume Long, informó en su cuenta en la red social Twitter que varias delegaciones hicieron lo mismo.
«Ecuador, Costa Rica, Bolivia, Venezuela, Cuba, Nicaragua salen del debate general de la Asamblea General de la ONU al tomar la palabra Michel Temer», publicó Long.
En una declaración oficial sobre la decisión de no escuchar el mensaje del presidente de Brasil en Naciones Unidas, divulgada en la página web de la Cancillería, el Gobierno tico asevera que «nos preocupa la situación en ese país, a cuyo pueblo apreciamos y con el que nos hemos sentido siempre cercanos», precisa PL.
Tomado: Granma