La candidata demócrata y favorita en las últimas encuestas fue contundente al afirmar que Estados Unidos “no puede perder su ventaja militar” ni “imponer límites arbitrarios a algo tan importante como sus Fuerzas Armadas”, como, dijo, propuso Trump al pedir una reducción de presupuesto, según la agencia de noticias EFE.
Hace unos meses un perfil de Clinton publicado por el diario The New York Times mostró una cara menos conocida de la ex primera dama, ex senadora y ex secretaria de Estado. Contó como la dirigente demócrata se convirtió en un “halcón” belicista, que goza del apoyo de los sectores más poderosos del complejo industrial militar.
Sin embargo, sus contactos con jefes militares y sus apoyos pasados a todo tipo de intervenciones militares desde la invasión a Irak en 2003 hasta un sinfín de operaciones secretas en Medio Oriente y África quedaron tapados en el debate público por la retórica incendiaria cotidiana de su rival republicano.
Hoy en la ciudad de Cincinatti, en Ohio, en la sede de la Legión Estadounidense, Clinton no sólo reveló otra vez esta cara, sino que la reivindicó.
“Mi oponente en esta carrera ha dicho muy claramente que piensa que la excepcionalidad estadounidense es insultante para el resto del mundo. Cuando decimos que Estados Unidos es excepcional, no significa que otros países no sientan un orgullo nacional profundo. Significa que reconocemos la capacidad única y sin parangón de Estados Unidos para ser una fuerza de paz y progreso, un campeón de la libertad”, sentenció.
Pese a los reiterados ejemplos de intervencionismo fallido del Pentágono en las últimas décadas -que terminaron en Estados fallidos en Irak, Afganistán o Libia, o en peores crisis en Siria, Somalía y Yemen- Clinton sostuvo hoy que cuando Estados Unidos “no lidera” en el mundo, deja “un vacío que o bien causa el caos o bien hace que otros países o redes se apresuren a llenarlo”.
Mientras las aspiraciones presidenciales de Trump despiertan indignación y miedo entre todos los sectores progresistas y moderados de Estados Unidos, principalmente por su discurso racista y su falta de propuestas concretas, Clinton cuenta con el apoyo de la mayoría de la primera plana militar de la superpotencia.
“Estoy honrada de tener el respaldo de tantos líderes militares retirados”, agradeció la candidata demócrata en Ohio y luego prometió que, si llega a la Casa Blanca, “invertirá en una nueva frontera de implicación militar, protegiendo los intereses estadounidenses en el espacio exterior y el ciberespacio”.
Como sucede en todas las campañas presidenciales, los dos principales candidatos son invitados a la Legión Estadounidense a hablar antes de las elecciones generales de noviembre. Mañana jueves será el turno de Trump.
Tomado: Telam/LIbreRed.net