“Llamo a los países europeos (…) a unirse a este movimiento. Es hora de dejar de hablar. Es hora de actuar. Eso es exactamente lo que hicieron los Estados Unidos y eso es lo que Europa necesita hacer”. Con estas palabras el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu ha entrado en el conflicto diplomático abierto entre los Estados Unidos, la UE e Irán por el restablecimiento de sanciones al país asiático por parte de Washington. En su habitual línea beligerante, el gobierno israelí incentiva de esta forma romper la vía de las negociaciones con Teherán y pasar al conflicto abierto.
En la misma jornada del lunes, la jefa de la Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, y los ministros de Relaciones Exteriores de Francia, Alemania y el Reino Unido anunciaron que la Unión Europea (UE) bloqueará las nuevas sanciones estadounidenses contra el país persa.
Con estas declaraciones, Netanyahu aludió a la orden firmada el mismo lunes por el presidente de EE.UU., Donald Trump, para reimponer las sanciones relacionadas con el tema nuclear contra Teherán en dos etapas.
La primera tanda de dichos embargos antiraníes se ha puesto en marcha desde la mañana de hoy martes, mientras que, en noviembre, una segunda tanda de sanciones apuntará al sector petrolero y gasífero, así como al Banco Central de Irán.
El premier israelí ha tachado la medida de Trump de una “importante decisión”, que a su juicio, “simboliza la determinación” de frenar lo que llamó los supuestos “planes (de Irán) para dotarse de armas nucleares”.
En la misma línea, el propio Netanyahu ya había pedido anteriormente a los líderes europeos que dejen de apoyar a lrán y su “mal” acuerdo nuclear.
Por su parte, el ministro de asuntos militares del régimen de Israel, Avigdor Lieberman, alabó la misma jornada lo que llamó la “iniciativa firme” de Trump que ha reemplazado a su parecer los “acuerdos equivocados”, refiriéndose al pacto nuclear alcanzado en 2015 por Irán y el entonces Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania).
Las sanciones de EE.UU. a Irán por su programa de energía nuclear fueron levantadas previamente luego de que fuera sellado el acuerdo nuclear conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, pese al pleno cumplimiento de Teherán con el pacto, la Administración de Trump sacó en mayo a su país de dicho acuerdo. Restableció entonces los embargos contra Irán y amenazó con imponer las “sanciones más duras de la historia” contra Teherán si no cumple con las demandas estadounidenses, entre ellas, el cese del enriquecimiento de uranio.
Tomado: tercerainformacion