En días previos la Unión Africana (UA) renovó su llamado a silenciar las armas para el 2020, en consonancia con la visión del bloque comunitario de alcanzar un continente estable, pacífico y próspero, reportó la agencia Prensa Latina.
Además, la UA llamó a los estados que la integran a tomar medidas concretas al respecto en el contexto de las actividades por el mes de la Amnistía de África, a celebrarse en septiembre.
Se incluirán campañas de concienciación pública, a fin de educar eficazmente a la ciudadanía e involucrar así a todos los segmentos de las comunidades afectadas.
El ente pretende movilizar su plena cooperación y apoyo para garantizar resultados positivos en cuanto a la entrega y recolección de armamentos adquiridos ilegalmente, así como en la promulgación de leyes en este sentido, de conformidad con las prácticas internacionales.
La UA enfatizó, asimismo, en que el flujo ilícito de armas, en especial las pequeñas y ligeras, en actores no estatales, contribuye a exacerbar la inseguridad y la violencia en diversas partes de la región, al socavar la cohesión social, el desarrollo socioeconómico y el funcionamiento de las instituciones.
El organismo declaró que su Consejo de Paz y Seguridad trabajará en cooperación estrecha con sus homólogos de Naciones Unidas y la Unión Europea para reducir la entrada ilegal de esos artículos en pos de transformar África en un continente libre de conflictos.
Ello mantiene correspondencia con las palabras del secretario general de la ONU, António Guterres, quien dijo el mes pasado en Addis Abeba, durante la segunda conferencia anual de las Naciones Unidas y UA, que «no podían permitirse el lujo de fracasar en África por lo que las organizaciones se encuentran trabajando juntas en el desarrollo sostenible del continente».
En el encuentro que Guterres copresidió con Moussa Faki Mahamat, líder de la UA, el primero remarcó su compromiso de reforzar la alianza entre la ONU y la Unión Africana, a la que calificó como el socio más cercano de la organización. También se mostró esperanzado en ese momento por los acontecimientos entre Etiopía y Eritrea y en Sudán del Sur en el camino a la paz.
Tomado: Granma