Si Israel bombardea nuestro aeropuerto, bombardearemos su aeropuerto; Si ataca nuestras instalaciones petroleras, atacaremos sus instalaciones petroleras”, así lo afirmó el miércoles el titular libanés Elias Bou Saab.
Saab descartó la posibilidad de que Israel comience una guerra contra El Líbano, indicando que el Ejército de Beirut tiene el poder disuasorio para evitarlo. “No creo que hoy Israel esté listo para una guerra. Ha cambiado la balanza de poder. Hoy existe una potencia disuasoria ante los israelíes”, detalló.
Según el funcionario, El Líbano no busca guerra con nadie, pero quiere detener todas las violaciones a sus espacios marítimos, aéreos, terrestres, y sus instalaciones y para garantizarlo cuenta con el Ejército.
El ministro libanés recorrió junto con el comandante del Ejército, el general Joseph Aoun, la región sur de este país que limita con los territorios ocupados palestinos, así como la sede de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para El Líbano (FPNUL).
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en una nueva amenaza contra El Líbano, conminó el pasado diciembre a Beirut a frenar las acciones del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano Hezbolá, o de lo contrario, amenazó con atacar al país árabe.
En respuesta, el secretario general de este Movimiento de resistencia, Seyed Hasan Nasralá, recordó que Hezbolá posee “suficientes” misiles guiados de precisión que los apuntaría a cualquier lugar que considerase necesario. “El campo de batalla en una guerra futura abarcará todos los territorios palestinos (ocupados por Israel) y nuestros misiles pueden golpear cualquier objetivo”, declaró.
La semana pasada, el general israelí Yoe Strick reconoció el aumento del poderío militar de este Movimiento, afirmando que este grupo será capaz de disparar a diario miles de misiles hacia Israel.
Tomado: Granma