La Policía de Carabineros de Chile incrementará su despliegue en esta capital durante los días previos al próximo 11 de septiembre, cuando se conmemoran 40 años del golpe de Estado contra el presidente Salvador Allende.
Según anunció el alto mando de la institución, serán situados agentes en autobuses del transporte urbano, en el Metro y en puntos de la ciudad donde se vaticina que podrían ocurrir incidentes violentos a raíz de las cuatro décadas del establecimiento de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), que dejó un saldo en el país de más de tres mil muertos.
En los últimos días, cinco autobuses capitalinos fueron quemados, dos en la comuna de Peñalolén y tres en Villa Francia, localidad donde el 29 de marzo de 1985 fueron asesinados los hermanos Rafael y Eduardo Vergara por efectivos de Carabineros.
El anuncio del refuerzo policial se informó en una reunión encabezada por el director general del cuerpo policial, Gustavo González, y en la cual participaron representantes del Metro, operadores del Transantiago, de empresas del sector y funcionarios del Ministerio de Transportes.
Previo a esta cita, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, dijo que el refuerzo policial será tanto terrestre como aéreo, complementado con trabajo de inteligencia para prevenir situaciones y poder adelantarse a ellas.
"Tenemos información de que van a continuar estas acciones", expresó Chadwick en relación con la quema de los autobuses, que atribuyó a extremistas.
En los aniversarios del golpe de Estado, fundamentalmente en las noches de cada 11 de septiembre, varias comunidades capitalinas y de la periferia son escenarios de disparos de armas de fuego, cortes de luz, barricadas y enfrentamientos entre grupos de ciudadanos y Fuerzas Especiales de Carabineros.
De manera habitual, los incidentes tienen por escenario al barrio de Villa Francia, en la comuna de Estación Central, y sectores de los municipios de Peñalolén, Conchalí, Pudahuel, La Pintana, Pedro Aguirre Cerda, Lo Espejo y San Bernardo.
Tomado: Prensa Latina